domingo, 18 de septiembre de 2016

Lectura Misa del Dia Domingo Septiembre 18 2016


XXV DOMINGO ORDINARIO

Amós: 8, 4-7

Contra los que obligan a los pobres a venderse.

Escuchen esto los que buscan al pobre sólo para arruinarlo y andan diciendo: "¿Cuándo pasará el descanso del primer día del mes para vender nuestro trigo, y el descanso del sábado para reabrir nuestros graneros?" Disminuyen las medidas, aumentan los precios, alteran las balanzas, obligan a los pobres a venderse; por un par de sandalias los compran y hasta venden el salvado como trigo.

El Señor, gloria de Israel, lo ha jurado: "No olvidaré jamás ninguna de estas acciones". 

Del salmo 112

Que alaben al Señor todos sus siervos. 
Bendito sea el Señor, alábenlo sus siervos. Bendito sea el Señor, desde ahora y para siempre. R/.

Dios está sobre todas las naciones, su gloria por encima de los cielos. ¿Quién hay como el Señor? ¿Quién iguala al Dios nuestro? R/.

Él tiene en las alturas su morada y sin embargo de esto, bajar se digna su mirada para ver tierra y cielo. R/.
Él levanta del polvo al desvalido y saca al indigente del estiércol para hacerlo sentar entre los grandes, los jefes de su pueblo. R/.

1 Timoteo: 2, 1-8

Pidan a Dios por todos los hombres, porque Él quiere que todos se salven.

Te ruego, hermano, que ante todo se hagan oraciones, plegarias, súplicas y acciones de gracias por todos los hombres, y en particular, por los jefes de Estado y las demás autoridades, para que podamos llevar una vida tranquila y en paz, entregada a Dios y respetable en todo sentido.

Esto es bueno y agradable a Dios, nuestro Salvador, pues Él quiere que todos los hombres se salven y todos lleguen al conocimiento de la verdad, porque no hay sino un solo Dios y un solo mediador entre Dios y los hombres, Cristo Jesús, hombre Él también, que se entregó como rescate por todos.

El dio testimonio de esto a su debido tiempo y de esto yo he sido constituido, digo la verdad y no miento, pregonero y apóstol para enseñar la fe y la verdad.

Quiero, pues, que los hombres, libres de odios y divisiones, hagan oración dondequiera que se encuentren, levantando al cielo sus manos puras.

San Lucas: 16, 1-13

No pueden ustedes servir a Dios y al dinero.

En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Había una vez un hombre rico que tenía un administrador, el cual fue acusado ante él de haberle malgastado sus bienes. Lo llamó y le dijo: `¿Es cierto lo que me han dicho de ti? Dame cuenta de tu trabajo, porque en adelante ya no serás administrador'. Entonces el administrador se puso a pensar: `¿Que voy a hacer ahora que me quitan el trabajo? No tengo fuerzas para trabajar la tierra y me da vergüenza pedir limosna. Ya sé lo que voy a hacer, para tener a alguien que me reciba en su casa, cuando me despidan'.

Entonces fue llamando uno por uno a los deudores de su amo. Al primero le preguntó: `¿Cuánto le debes a mi amo?' El hombre respondió: 'Cien barriles de aceite'. El administrador le dijo: 'Toma tu recibo, date prisa y haz otro por cincuenta'. Luego preguntó al siguiente: 'Y tú, ¿cuánto debes?' Éste respondió: 'Cien sacos de trigo'. El administrador le dijo: 'Toma tu recibo y haz otro por ochenta'.

El amo tuvo que reconocer que su mal administrador había procedido con habilidad. Pues los que pertenecen a este mundo son más hábiles en sus negocios, que los que pertenecen a la luz.

Y yo les digo: Con el dinero, tan lleno de injusticias, gánense amigos que, cuando ustedes mueran, los reciban en el cielo. El que es fiel en las cosas pequeñas, también es fiel en las grandes; y el que es infiel en las cosas pequeñas, también es infiel en las grandes. Si ustedes no son fieles administradores del dinero, tan lleno de injusticias, ¿quién les confiará los bienes verdaderos? Y si no han sido fieles en lo que no es de ustedes, ¿quién les confiará lo que sí es de ustedes?


No hay criado que pueda servir a dos amos, pues odiará a uno y amará al otro, o se apegará al primero y despreciará al segundo. En resumen, no pueden ustedes servir a Dios y al dinero". 





"Los del terreno pedregoso son los que por algún tiempo creen, pero en el momento de la prueba fallan" (Lc.8,4-15).... Dios amado que no dejas de seguir sembrando en nuestro corazones tu amor. Porque deseas ver nuestro obrar, nuestra vida y todo lo que somos con los frutos que deseas dar a mis manos.

Deseas siempre que mi vida esté llena de las maravillas de tu bondad. Llenas todo lo que somos con tu amor, restauras nuestro corazón, das vida y salud a nuestra alma y tejes cada una de mis acciones para que nuestro vivir te glorifiquemos.

No permitas Señor que las situaciones de cada día ahoguen los motivos para continuar, ni permitas que los momentos difíciles hablen más fuerte que tu voz. Pues Tú comprendes que me encuentro en todo momento entre el bien y el mal. Concédenos la sabiduría, fortaleza y un amor tan grande para elegir siempre amar y seguirte a ti que eres la verdad, el camino y la vida. Amen. Gracias señor Gracias
Que la obra que Dios hace en nosotros no la destruya nuestra falta de amor.  

Seguimos confiando y orando , feliz domingo del señor

Rossy y Alejandro
P. Creciendo en el Amor



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